Diferencias entre una boleta y una factura
facturas boletasMuchas veces al consumir un producto o servicio de alguna empresa, restaurante o cualquier negocio de actividad comercial siempre te habrán ofrecido la redacción de una boleta o factura, muchas personas no aceptan una, otras si lo aceptan, pero no le dan la importancia. Muchas personas tampoco saben la diferencia entre unas y otras. Factura 24 en esta ocasión te quiere exponer: ¿Cuáles son las diferencias entre una boleta y una factura?
Primero empecemos definiendo cada una con la finalidad de tener datos relevantes y exactos que nos permitan hacer una correcta comparación.
¿Qué es una boleta?
Es un comprobante de pago emitido por las empresas y los pequeños negocios, cuando venden bienes o servicios a consumidores o usuarios finales.
Los negocios comprendidos en el Nuevo Régimen Único Simplificado (NRUS), las empresas y entidades por la venta de bienes o servicios a consumidores finales. Por ejemplo, los restaurantes, hospedajes, peluquerías, centros de belleza, joyerías, lavanderías, zapaterías, tiendas de ropa, etc.
La boleta de venta permite identificar al emisor y su domicilio fiscal. Asimismo, para ser válida debe tener el número de serie y orden correlativo, la razón social, el número del RUC del emisor, la fecha de emisión, así como el importe y detalle del bien transferido o servicio prestado, entre otros datos.
Las boletas de venta acreditan la propiedad de un bien adquirido o la prestación de un servicio recibido. Adicionalmente, los contribuyentes del Régimen General pueden utilizar el gasto sustentado en boletas de ventas que les hayan sido expedidas exclusivamente por sujetos del Nuevo RUS, hasta por un límite determinado, para fines de deducirlo en la determinación de su Impuesto a la Renta. Las boletas de venta no pueden ser utilizadas para el crédito fiscal del IGV.
¿Qué es una factura?
Una factura es un documento comercial que registra la información relativa a la compra o venta de un bien o servicio.
La información de la factura debe responder a qué, quién, cómo, cuándo, dónde y por qué de una actividad comercial entre cliente y empresa. Tiene validez fiscal y legal, por lo que se considera una prueba física de que una operación se ha realizado entre dos partes, de forma correcta y satisfactoria.
La factura también sirve para demostrar que la operación ha sido válida y que se han pagado los impuestos correspondientes. Así:
El vendedor ha de presentarla si quiere exigir un pago no realizado.
Toda empresa o autónomo está obligado a emitir facturas.
La factura es esencial en cualquier servicio post-venta, pues es imprescindible para efectuar una devolución o una reclamación (tanto por parte del que vende como del que compra).
Es el justificante y garantía ante cualquier problema que pueda surgir entre ambas partes.
A su vez, para la empresa es un justificante fiscal que detalla a Hacienda cada ingreso percibido y cada gasto soportado, entre los que se incluyen los impuestos correspondientes al servicio prestado, por ejemplo el Impuesto sobre el Valor Añadido (IVA).
Un gasto que no se acredite en una factura no es un gasto a efectos tributarios. Y a eso habrá que añadir que no podrá incluirse dentro de la contabilidad de la empresa.